Nuestra propuesta por el Valle del Nansa comienza en la desembocadura del río del mismo nombre, en Tina Menor.


Siguiendo río arriba, por la carretera comarcal CA-181, pasaremos por diversas localidades como Muñorrodero, primer pueblo que encontramos al entrar en el valle, Camijanes o Puente El Arrudo. En este último deberemos desviarnos a la derecha y cruzar el río Nansa hacia Cades para visitar un imprescindible de la comarca, la Ferrería de Cades.


Tras conocer cómo se trabajaba el hierro en esta tierra, retornaremos nuestros pasos hacia Puente El Arrudo para visitar la Cueva de El Soplao, capilla Sixtina de la geología, a la que llegaremos siguiendo la CA-181 tras desviarnos en la localidad de Rábago. Y, si quieres continuar conociendo el mundo subterráneo sajanansero nada mejor que La Cueva de Chufín, una joya del arte rupestre declarada Patrimonio de la Humanidad que se encuentra en la cercana localidad de Riclones, a la que llegaremos por la misma CA-181 en dirección a Puentenansa.


Llegada la hora de comer, encontraras una gran oferta de restaurantes en todo el valle, donde podrás degustar desde un buen plato de comida tradicional, como lo es el cocido montañés, que no debes dejar de probar, hasta una buena carne de vaca Tudanca, criada en esta tierra, o una buena hogaza de pan horneada al estilo tradicional.


Tras haber comido, que mejor forma de hacer la digestión que dando un paseo por una de las localidades más importantes del valle del Nansa, declarada Conjunto Histórico, que fue inspiración de grandes escritores y lugar de residencia del José María de Cossío en su Casona de Tudanca. Para llegar a este pueblo, debes seguir la carretera comarcal CA-181 hasta Puentenansa y desde allí tomar la CA-821 hacia el Puerto de Piedrasluengas. También cabe la posibilidad de que, si te gusta el mundo mariano y el misticismo religioso, visites San Sebastián de Garabandal, localidad rodeada de un aura espiritual, para lo que deberás desviarte en tu trayecto en la preciosa y solariega localidad de Cosio.


Una vez en la parte alta del valle, después de dar una vuelta por Tudanca y su casona, te aconsejamos continuar el camino y seguir subiendo el puerto de PiedrasLuengas hacia el Valle de Polaciones, límite entre comunidades; y, asomarte al mirador de La Cruz de Cabezuela para ver la vecina comarca de Liébana. Además, en este trayecto, es posible disfrutar de un precioso paisaje de montaña que se ve roto por la presa y embalse de la Cohilla, donde se marca el cambio de tránsito.


Ya en Polaciones, tras haber disfrutado de su paisaje en los distintos miradores, sugerimos, si queda tiempo en el día, introducirse en el interior del municipio y acercarse a Tresabuela, localidad de nacimiento del Padre Rábago, tras desviarte en La Laguna y pasar por Puente Pumar y Lombraña.



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